miércoles, 4 de noviembre de 2009

Tinta China III



Saludo al cielo y bajo por los escalones con sus publicidades. Atravieso un túnel, no puedo dejar de pensar en "Irreversible", por más que intente. De pronto llega la música lejana del vagón que canta "ojos del cielo"; qué paradoja... acá en este mundo donde el cielo es refutado por los techos.
Llego a las vías, me intimidan entonces miro el puesto de diarios (actividad mancomunada de la espera bajo tierra) observo como las demás personas a mi lado las mujeres desnudas, los libros baratos, las revistas con tapas que no dicen nada, las otras que no entiendo, y las que me hacen reir. Un hombre compra una de informática, hay público para todo concluyo y me paro en el abismo del andén. Imagino que el amor esta en la estación de enfrente, en un mundo paralelo y distante y miro las vías como brazos largos y solitarios.

Ay!!! las vías del subte están tan quietas y gritan tanto! Como quien se entumece de tanto ver. Las piedras en su interior que desean ser las piedras de un lago, mientras que las piedritas del lago San Roque quieren venir a conocer el subte.
Las vías del subte son tan oscuras que no resisten la obviedad.

El subte está llegando de otra estación de otra misión: Transportar gente, transportar sueños, el subte es como un limbo…Es un limbo! Transporta sueños que no pueden salir a la luz, te aprieta a otro cuerpo que no deseas, deseando ser otra persona que abraza y borra la tristeza de los nenitos del subte. El movimiento del subte hace gritar más a las vías, las vías invitan a tirarse presentándose la congelada realidad, las sombras no se proyectan porque no hay atardecer, solo luz artificial como lo artificioso del mar de gente, mar de gente sin pleamar, con horarios y ansiedad! Incalculables líneas y combinaciones para recorrer bajo tierra la ciudad y escuchar gritar a las vías, abandonarse a los escalones de la escalera mecánica que es tan mecánica como los sueños…y las vías siguen gritando a la espera de un descarrilamiento, me quiero tirar, no lo hago, el mar de gente me deja en la cresta de la ola y veo luz…Vuelvo al cielo, estoy contenta de verdad!jaja! Me rió de mí, quizás el subte sólo sea el medio de transporte más rápida para esta ciudad atascada, y nada más…

Mientras me alejo vuelve a gritarme la vía…ya no la escucho…los árboles me susurran y el corazón deja de latir desesperadamente encerrado, el in door siempre fue más complicado… las vías del subte gritan, los pasajeros se ausentan…
PirRuXa.

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