El tren de mis nubes

El tren de mis nubes se atreve a dictarme
los párrafos amantes y los puntos errantes.
Mis palabras no son más que voces borrachas,
encuentros de acentos y sentidos no comunes,
festejos de una nueva clandestinidad osada.
Espinas de sospechas arranca a su paso
Eólica es la energía de su oración danzante…
Mis desiertos brotan en su jardín sediento
Las flores arrasan con todas las condenas.
Mis palabras también son vasos servidos.

Las muñecas no sacaron boleto en mi infancia
Quién sabe qué juguete dejé en esas canciones.
Motores y miradas: paradojas del mas acá,
Oleaje descriptivo del libro sin sonrisas,
El tren de mis nubes borra todo ese dolor.
La lluvia me refresca en la próxima estación,
el sol el sol el sol, tres veces canta el sol…
Declaraciones desafinadas se renuevan:
(Quizás el gallo no exista en otro amanecer
más que en el dicho, por más que mal dicho sea)

Empiezo a salir de una trilha mágica,
me adentro a un sin fin de barreras…
Al andén que tantas despedidas me dio,
a las vías que son cada día un misterio
donde viajo inmersa en el mismo cielo .
El tren de mis nubes descarrila en el grito,
en el interior de los furgones necesitados
del increíble lenguaje de los sentidos encendidos,
Locomotoras del desencuentro conducen ebrias
Y el oeste desea ser norte viajando en los techos.

Encabezando la lista de corazones suicidas
que detienen el recorrido habitual de las bocas
se encuentra el túnel de los deseos únicos.
Mis sacudidas emociones abren mis ventanas,
las parodias suben sin rumbo en otros vagones…
Miro las personas diluirse en el parpadeo diario,
siento el movimiento hipnótico del viaje,
pregunto a ese puente que ya atravesé:
¿Donde vale la palabra borracha de mis voces?
¿Donde, Si no toma el tren de mis nubes?

PIRUXA -2009-